(DES)APRENDIENDO
Nuestros procesos y materiales
Aunque más complicado de lo inicialmente pensábamos, el proceso de hacer mas ecológica la práctica artística se ha convertido en un viaje fascinante lleno de de descubrimientos, aprendizajes e historias que queremos compartir.
Desde una obra de arte a una pieza artesana, encarnan un conjunto de valores e ideas y reflejan también las convicciones del artista.
Creemos en la necesidad de una coherencia entre el arte y cómo se hace, sin separar el contenido de cómo se produce.
Creemos que tenemos una responsabilidad compartida y nuestros estudios artísticos, de diseño o artesanos por pequeños que sean no estamos exentos. Todos podemos hacer algo ante la crisis climática .
No es siempre sencillo ni posible, pero trabajamos con este principio guía. Por eso, cuando tomamos decisiones cotidianas con respecto a nuestras obras, trabajamos con nuestra preocupación por la sostenibilidad en mente.
TRANSFORMANDO EL TALLER Y LA PRÁCTICA
– Aprovechamos cuando es posible la energía del sol para infusionar, macerar o secar.
– Reducimos los procesos que requieren mucho gasto de agua o energía con paciencia y tiempo.
– Reducimos o renunciamos a determinadas elaboraciones que, aunque son tradicionales, contienen elementos o materiales tóxicos, o muy contaminantes, escasos en la naturaleza, o de origen y procesos de comercialización opacos. Son sustancias que facilitan la expresión de los colores botánicos, a resinas, colas, medium, barnices, disolventes, etc.
– La mayoría de las flores, hojas y plantas utilizadas proceden de cultivadores (a ser posible locales), jardines, huertas y plantaciones de colaboradores y amigos.
– Trabajamos para aceptar la transformación de los materiales, el error y la incertidumbre como parte de la naturaleza, de nuestro crecimiento personal y del proceso creativo.
– Exploramos materiales a partir de residuos orgánicos.
– Reutilizamos materiales y envases de todo tipo.
– Compostamos los restos vegetales.
– Reutilizamos baños de mordiente, baños de teñido sobrantes; restos de pastas, etc.
-Recogemos, cuando es posible, agua de lluvia.
-Controlamos el pH y presencia de sales en el agua que desechamos para utilizarlas en el riego de nuestras plantas: si no podemos regar con ella, renunciamos al proceso.
– Hacemos un uso controlado de Instagram, que usamos como repositorio de imágenes de procesos.
– Estudiamos, nos formamos en la gestión de las sostenibilidad en la empresa* y la educación medioambiental, participamos en foros y conversaciones.
– Colaboramos activamente con emprendedores, empresas tradicionales, ONG e instituciones educativas comprometidas activamente con los principios de la educación medioambiental.
*(Institute of Sustainability Leadership, University of Cambridge)
«(…) el arte y el activismo, nuestros campos de trabajo y experiencia, pueden aumentar la atención y la percepción de situaciones que pueden haber sido invisibles, pasadas por alto o desatendidas. A menudo corren a diferentes velocidades: el activismo típicamente tiene una dirección clara y está orientado a efectuar cambios sistémicos rápidos, mientras que el arte es más lento, ofreciendo espacios complejos de asombro, cuestionamiento y reflexión, individual y colectivamente.»
WASTE BIO-COLOURS
Colores extraídos de residuos de cocina
En nuestras cocinas, cada día restos de vegetales de preparar verduras son arrojados a la basura. Muchos contienen pigmentos origen biológico. Son los WASTE Bio-Colours que puedes extraer de peladuras, semillas, hojas, cáscaras o restos de podas antes de compostarlas o separarlas para la recogida orgánica.